Archivo por meses: mayo 2025

Yo en ti, Tú en mí. Comentario para Matrimonios: Juan 13, 16-20

Para ver los próximos RETIROS Y MISIONES haz click AQUÍ

 

Evangelio del día

Lectura del santo evangelio según san Juan 13, 16-20

Cuando Jesús terminó de lavar los pies a sus discípulos les dijo:
«En verdad, en verdad os digo: el criado no es más que su amo, ni el enviado es más que el que lo envía. Puesto que sabéis esto, dichosos vosotros si lo ponéis en práctica. No lo digo por todos vosotros; yo sé bien a quiénes he elegido, pero tiene que cumplirse la Escritura: “El que compartía mi pan me ha traicionado”. Os lo digo ahora, antes de que suceda, para que cuando suceda creáis que yo soy.
En verdad, en verdad os digo: el que recibe a quien yo envíe me recibe a mí; y el que me recibe a mí recibe al que me ha enviado».

Yo en ti, Tú en mí.

Señor, el Padre está en ti, y por eso, el que te recibe a Ti, recibe al Padre. Pero ¿Cuánto de Ti hay en mí de manera que, el que me reciba a mí, te recibe a Ti y por tanto al Padre? Cuando nos servimos mutuamente, dejamos parte de nosotros en aquellos a quienes servimos y parte de ellos, queda también en nosotros. Adentrarnos en su intimidad, hace que parte de su intimidad quede inscrita en nuestros corazones. Tú viniste a servir y en esa venida te quedaste con nosotros. Tu Corazón se hizo humano y la humanidad está ya también contigo, cada uno. Ya no somos cuerpo y alma, ahora somos cuerpo, alma y Espíritu. Qué belleza hay en este donarme a mi esposo y recibir el don de mi esposo, que nos hace uno por el Espíritu que ya forma parte de nosotros. Que belleza el dinamismo del amor. Yo en Ti, Tú en mí, mi esposo en mí, yo en mi esposo, Tú en nosotros y el Padre en todos… Unidos por un mismo Espíritu.

Aterrizado a la vida matrimonial:

Marta: Esposo, tenemos que vivir con “sobrenaturalidad”. Si el Espíritu forma parte ya de nosotros, no podemos vivir como si fuésemos sólo cuerpo y alma. Nuestro cuerpo tiene que estar gobernado por nuestra alma (Entendimiento y voluntad) y nuestra alma por el Espíritu: Sabiduría, Entendimiento, Consejo, Ciencia, Piedad, Fortaleza y Temor de Dios. Esas son las potencias que nos rigen.
Alfonso: Ya, pero yo eso lo veo muy abstracto. ¿Cómo utilizamos ese poder del Espíritu en nuestro día a día?
Marta: Bueno, de eso no nos debemos preocupar. Tenemos que estar cerca de Él, contar con Él y ponernos a Su disposición. Después, Él actuará, y nos irá guiando entregándonos los dones que necesitemos en cada momento. Sólo estar con Él y dejarse llevar ¿Vale?
Alfonso: No lo entiendo mucho, pero confío en lo que me dices.
Marta: Pues esa es la actitud. Espíritu Santo, que habitas en nosotros, tienes vía libre. Estamos listos para que nos conduzcas.

Madre,

Recibimos al Señor con alegría en cada oración, en cada Eucaristía y trabajamos por hacer nuestra propia eucaristía entregándonos a otros en Su nombre. Cuando quiera, como quiera, donde quiera. Alabado sea el Señor.

Con Tus motivaciones. Comentario para Matrimonios: Juan 15, 9-17

Para ver los próximos RETIROS Y MISIONES haz click AQUÍ

 

Evangelio del día

Lectura del santo evangelio según san Juan 15, 9-17

En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos:
«Como el Padre me ha amado, así os he amado yo; permaneced en mi amor.
Si guardáis mis mandamientos, permaneceréis en mi amor; lo mismo que yo he guardado los mandamientos de mi Padre y permanezco en su amor.
Os he hablado de esto para que mi alegría esté en vosotros, y vuestra alegría llegue a plenitud. Este es mi mandamiento:
que os améis unos a otros como yo os he amado.
Nadie tiene amor más grande que el que da la vida por sus amigos. Vosotros sois mis amigos si hacéis lo que yo os mando.
Ya no os llamo siervos, porque el siervo no sabe lo que hace su señor: a vosotros os llamo amigos, porque todo lo que he oído a mi Padre os lo he dado a conocer.
No sois vosotros los que me habéis elegido, soy yo quien os he elegido y os he destinado para que vayáis y deis fruto, y vuestro fruto permanezca.
De modo que lo que pidáis al Padre en mi nombre os lo dé.
Esto os mando: que os améis unos a otros».

Con Tus motivaciones.

Ese «amaos como yo os he amado» me recuerda que debo vivir mi vida en Ti, no vivir mis relaciones fuera de Ti, sino dentro de Ti, en Ti. Ponerme en las situaciones en que Tú viviste lo que yo estoy viviendo, para interpretarlo como Tú, para vivirlo con Tus motivaciones y responder en consecuencia ¿Cómo? Amando cómo Tú amas.

Aterrizado a la vida Matrimonial:

María: (Piensa: No me lo puedo creer, ahora que estamos en nuestro momento, llamen por teléfono y mi esposo lo coja. ¿Es que todo el mundo es más importante o tiene más prioridad que yo? Incluso en este, que era nuestro momento, parece que tiene otras prioridades por delante de mí.) (Reza pidiendo auxilio) No puedo, Señor, me atormenta esta idea, no lo entiendo, me estoy poniendo nerviosa… ¿Cómo amar en esta situación? No puedo evitar sentir indignación hacia él. Encima se pone tan simpático… Estoy aquí a su lado y como si no existiera, le da igual que esté esperando a que termine, y no tiene ninguna prisa. Señor, ayúdame a amarle en esta situación.
El Señor: Te comprendo. Porque a mí, también me haces esperar muchas veces centrada en otras cosas. Supongo que te habrás dado cuenta. Pero yo siempre cargo con tus culpas y tus impaciencias, así que, pon esta situación en mis manos. Yo seré quien le juzgue justamente. Deja esta situación en mis manos y descansa en mí. Ahora, ocúpate de amarle a él, que es tu misión. Mírale con ternura, en sus limitaciones. Sé misericordiosa como el Padre. Emplea en ello todos tus esfuerzos, y mi alegría estará en ti.

Madre,

Andamos siempre con esa lucha interior, entre el orgullo y el amor, la comodidad y el servicio… Esta batalla cansa, Madre, y de vez en cuando me veo superado por ella, me salgo de Tu Corazón, y pierdo la alegría. Ayúdame Madre en esos momentos. Necesito tus brazos maternales. Señor, ten piedad de mí y de mi familia. Amén.

De manera inevitable. Comentario para Matrimonios: Juan 10, 22-30

Para ver los próximos RETIROS Y MISIONES haz click AQUÍ

Evangelio del día

Lectura del santo evangelio según san Juan 10, 22-30

Se celebraba en Jerusalén la fiesta de la Dedicación del templo. Era invierno, y Jesús se paseaba en el templo por el pórtico de Salomón.
Los judíos, rodeándolo, le preguntaban:
«¿Hasta cuándo nos vas a tener en suspenso? Si tú eres el Mesías, dínoslo francamente».
Jesús les respondió:
«Os lo he dicho, y no creéis; las obras que yo hago en nombre de mi Padre, esas dan testimonio de mí. Pero vosotros no creéis, porque no sois de mis ovejas. Mis ovejas escuchan mi voz, y yo las conozco, y ellas me siguen, y yo les doy la vida eterna; no perecerán para siempre, y nadie las arrebatará de mi mano. Lo que mi Padre me ha dado es más que todas las cosas, y nadie puede arrebatar nada de la mano de mi Padre. Yo y el Padre somos uno».

De manera inevitable.

Padre, todavía está cerca el tiempo en que vivíamos la Pasión de Tu Hijo. Contemplando el precio que sabes que pagó por nuestro rescate ¿Cómo ibas a permitir ahora que nadie nos arrebate de Tu mano poderosa?
Hay una fuerza que nos atrae hacia Ti de una manera inevitable, y es Tu Propio Amor.
Hoy celebramos el día de Ntra. Señora de Fátima. Ella pisa la cabeza de la serpiente y nos lleva bajo Su manto maternal a los brazos abiertos de Jesús.

Aterrizado a la vida Matrimonial:

Rodrigo: Sole, son tantas las tentaciones que nos bombardean cada día. A veces pienso que este camino hacia la santidad es inalcanzable para mí.
Sole: Y es que es inalcanzable para ti, Rodri, pero si tú quieres, se convierte en algo inevitable para Dios.
Rodrigo: Realmente ¿Quién va a poder nada contra el Amor de Dios que entregó a Su Hijo por nosotros? Tienes razón, Sole. No sé cómo he permitido que me entren las dudas. Nadie me arrebatará de Tus brazos divinos.

Madre,

Felicidades por este día Tuyo que tanto significa para nosotros. Alabado sea Dios y Nuestra Madre Bendita.

Buenos pastos. Comentario para Matrimonios: Juan 10, 1-10

Para ver los próximos RETIROS Y MISIONES haz click AQUÍ

Evangelio del día

Lectura del santo evangelio según san Juan 10, 1-10

En aquel tiempo, dijo Jesús:
«En verdad, en verdad os digo: el que no entra por la puerta en el aprisco de las ovejas, sino que salta por otra parte, ese es ladrón y bandido; pero el que entra por la puerta es pastor de las ovejas. A este le abre el guarda y las ovejas atienden a su voz, y él va llamando por el nombre a sus ovejas y las saca fuera. Cuando ha sacado todas las suyas camina delante de ellas, y las ovejas lo siguen, porque conocen su voz: a un extraño no lo seguirán, sino que huirán de él, porque no conocen la voz de los extraños».
Jesús les puso esta comparación, pero ellos no entendieron de qué les hablaba. Por eso añadió Jesús:
«En verdad, en verdad os digo: yo soy la puerta de las ovejas. Todos los que han venido antes de mí son ladrones y bandidos; pero las ovejas no los escucharon.
Yo soy la puerta: quien entre por mí se salvará y podrá entrar y salir, y encontrará pastos.
El ladrón no entra sino para robar y matar y hacer estragos; yo he venido para que tengan vida y la tengan abundante».

Buenos pastos.

La única manera de llevar nuestro pequeño rebaño hacia buenos pastos es entrar por la Puerta que es Cristo. Él es el Camino, la Verdad y la Vida. Si entro por Él, no se desperdigarán nuestras ovejas.

Aterrizado a la vida Matrimonial:

David: Tantos años educando a nuestros hijos con unos criterios mundanos, y ahora que hemos descubierto al Señor y el Evangelio. ¿Qué podemos hacer?
María: Lo primero pedirles perdón, y lo segundo, como ya son mayores, lo único que podemos hacer es darles testimonio con nuestra vida de esposos cristianos.
David: Me parece muy buena idea. Amémonos con el amor de Cristo y Él hará el resto. También se me ocurre que como regalo de Navidad les regalemos un retiro de Proyecto Amor Conyugal, a ver si se convierten como nos ocurrió a nosotros. ¿Te parece?

Madre,

Queremos permanecer en tu Inmaculado Corazón, porque es la manera de entrar por el Corazón de Cristo.

El piropazo. Comentario para Matrimonios: Juan 10, 27-30

Para ver los próximos RETIROS Y MISIONES haz click AQUÍ

Evangelio del día

Lectura del santo Evangelio según San Juan 10, 27-30

En aquel tiempo, dijo Jesús:
«Mis ovejas escuchan mi voz, y yo las conozco, y ellas me siguen, y yo les doy la vida eterna; no perecerán para siempre, y nadie las arrebatará de mi mano.
Lo que mi Padre me ha dado es más que todas las cosas, y nadie puede arrebatar nada de la mano de mi Padre.
Yo y el Padre somos uno».

El piropazo.

Señor, Tú dices: «Lo que mi Padre me ha dado es más que todas las cosas». Y esos que te ha dado Tu Padre somos, entre otros, mi esposo y yo. Para Ti somos más importantes que todas las cosas. ¡Qué alegría tan grande me da que me lo digas! Aunque sé que nos amas hasta el extremo pero nunca me había planteado, que somos lo más importantes para Ti, y me encanta saberlo. Gracias Señor por ese piropazo.

Aterrizado a la vida Matrimonial:

Mariajo: ¿Sabes? Sólo con saber que soy tan importante para ti como lo soy yo para el Señor, tendría suficiente. No necesito más.
Nacho: Y así es. A veces puede parecer que no, por mí falta de delicadeza, pero conociendo como conoces mis torpezas, verás que sí, que eres lo más importante para mí.
Mariajo: Sé que te esfuerzas por demostrármelo cada día. También es verdad que yo no te miro con mirada limpia y pura y a veces me dejo llevar por sensaciones interpretando lo que haces según mis juicios. Pero gracias por confirmarme que sí, que es así. A partir de ahora me esforzaré por verlo.
Nacho: Y yo me esforzaré especialmente para facilitar que lo veas.
Mariajo: Te amo. ¿Me abrazas?
Nacho: Te amo.

Madre,

Tú que eres Madre del Amor Conyugal, ruega por nosotros.