Archivo por días: 16 febrero, 2022

Ternura x ventura. Comentario para Matrimonios: Marcos 8, 22-26

EVANGELIO

El ciego estaba curado y veía todo con claridad.
Lectura del santo Evangelio según san Marcos 8, 22-26

En aquel tiempo, Jesús y sus discípulos llegaron a Betsaida.
Y le trajeron a un ciego pidiéndole que lo tocase.
Él lo sacó de la aldea, llevándolo de la mano, le untó saliva en los ojos, le impuso las manos y le preguntó:
«¿Ves algo?».
Levantando los ojos dijo:
«Veo hombres; me parecen árboles, pero andan».
Le puso otra vez las manos en los ojos; el hombre miró: estaba curado y veía todo con claridad.
Jesús lo mandó a casa diciéndole que no entrase en la aldea.

Palabra del Señor.

Málaga: Recorrido por vuestro corazón de esposos, con José Luis y Magüi, profundizando en «Los frutos del Amor Conyugal» HOY 16 de febrero en la Casa Hermandad del Sepulcro (Calle Alcazabilla, 5) a las 20h

Ternura x ventura.

Jesús llevaba a aquel ciego de la mano. Yo lo habría cogido quizás del brazo, pero ¿de la mano? Indica un gesto de ternura fuera de lo corriente. Los gestos que vienen después van en la misma línea. Son los gestos de cariño de Dios. Yo he vivido muchas caricias de Dios, me ha cuidado, me ha protegido, me ha rescatado otras veces, me ha llevado aparte otras muchas. Está tan pendiente de mí…
Ese mismo cuidado es el que quiere tener Jesús con mi esposo a través de mí. Él quiere darle la vista a mi esposo a través de mis gestos de cariño. Cuánto ayudan los gestos de cariño a crecer en el amor, a ver más claramente. Son gestos redentores.

Aterrizado a la vida matrimonial:

Carlos: Cuando veo unos esposos distantes y fríos entre ellos, percibo una sensación desagradable. Es como si su frialdad casi me golpease. Quieran o no quieran están transmitiendo que se han acostumbrado ya el uno al otro y han dejado de admirarse mutuamente, incluso han dejado de valorarse. En cambio, cuando veo un matrimonio que tienen entre ellos gestos de cariño, delicadezas, que se miran mucho… Me llama la atención y me resulta muy atractiva la escena. Es como que me atrae y me anima a hacer yo lo mismo.
Teresa: Qué importantes son los gestos de cariño entre nosotros, Carlos. Más de lo que imaginamos. Yo me siento más viva cuando me acaricias y me besas, me siento más mujer, más feliz. Me ayudan mucho sentir tu cariño.
Carlos: A mí también. A veces no le damos importancia, parecen tonterías, pero no lo son en absoluto. Son muy importantes. Recuerdo que antes me costaba hacerlo, pero me dijeron que me debía esforzar y ahora me salen de manera natural. Qué gran consejo.

Madre,

Si Jesús tenía esos gestos, en mucha parte los aprendería de ti. Me encanta sentirme en tus brazos. Gracias Madre.