
Qué importante es ponerse en camino y no quedarse parado después de que el Señor nos llama. La alegría que infunde el Espíritu Santo en nuestro matrimonio, llega a nuestro alrededor.

Qué importante es ponerse en camino y no quedarse parado después de que el Señor nos llama. La alegría que infunde el Espíritu Santo en nuestro matrimonio, llega a nuestro alrededor.