
Practicaré la mansedumbre con mi esposo/a este adviento, erradicando la violencia, poniendo dulzura y cortesía. Es un don del Espíritu, una gracia que hay que pedir para purificar la relación conyugal.

Practicaré la mansedumbre con mi esposo/a este adviento, erradicando la violencia, poniendo dulzura y cortesía. Es un don del Espíritu, una gracia que hay que pedir para purificar la relación conyugal.