
¿Para qué defenderme ante mi esposo/a? Dios se encargará de mi defensa. Él me protege y, cuando permite una situación dura para mí, si no me defiendo, será una ocasión para dar testimonio.

¿Para qué defenderme ante mi esposo/a? Dios se encargará de mi defensa. Él me protege y, cuando permite una situación dura para mí, si no me defiendo, será una ocasión para dar testimonio.