EVANGELIO

El sábado se hizo para el hombre y no el hombre para el sábado.
Lectura del santo Evangelio según san Marcos 2, 23-28

Sucedió que un sábado Jesús atravesaba un sembrado, y sus discípulos, mientras caminaban, iban arrancando espigas.
Los fariseos le preguntan:
«Mira, ¿por qué hacen en sábado lo que no está permitido?».
Él les responde:
« ¿No habéis leído nunca lo que hizo David, cuando él y sus hombres se vieron faltos y con hambre cómo entró en la casa de Dios, en tiempo del sumo sacerdote Abiatar, comió de los panes de la proposición, que solo está permitido comer a los sacerdotes, y se los dio también a quienes estaban con él».
Y les decía:
«El sábado se hizo para el hombre y no el hombre para el sábado; así que el Hijo del hombre es señor también del sábado».

Palabra del Señor.

Avisos:

• Anuncio en Vitoria: MAÑANA 22 de enero de 2020 a las 19:45h en Parroquia María Inmaculada, (Magdalena Kalea, 1)
• Anuncio en Madrid: 25 de enero de 2020 a las 20:00h en Parroquia Virgen del Castillo, San Isidoro y San Pedro Claver (Hortaleza) 
• Retiro en San Sebastián: 24-26 de enero de 2020. Información aquí: http://wp.me/p6AdRz-1ZP.
• Retiro en Vigo: 31 de enero, 1 y 2 de febrero de 2020. Infórmate e inscríbete aquí: https://wp.me/p6AdRz-229
• Anuncio en Madrid (Móstoles): 2 de febrero de 2020 a las 17:00h en Parroquia Nuestra Señora de la Asunción (Plaza Ernesto Peces 1, Móstoles) 
• Anuncio en Málaga: 5 de febrero a las 20:30h en Parroquia del Carmen (Málaga) 
• Retiros en Madrid y Salamanca: 14-16 de febrero (MADRID) y 21-23 de febrero (SALAMANCA). COMPLETOS
• Retiro en Toledo: 07-09 de febrero. Infórmate e inscríbete aquí: http://wp.me/p6AdRz-25O
• Retiro en Sevilla: 14-16 de febrero de 2020. COMPLETO
• Retiro en Barcelona: 28 feb – 01 Marzo de 2020. Información e inscripciones aquí: http://wp.me/p6AdRz-26h

(Retiros pendientes de apertura de inscripciones. Informaremos más adelante)

…Para ver más pincha aquí: https://wp.me/P6AdRz-D1

Mejor con miel…

Las leyes están al servicio del amor entre personas. Si tengo alguna ley que me impide amar a mi esposo: Puntualidad, orden, limpieza, dieta, cuidado del cuerpo… incluso leyes “piadosas”, todas deben estar sometidas al amor a mi esposo, porque el amor a Dios y a mi esposo son las leyes principales que rigen mi vida.

La ley puede matar el amor cuando se utiliza como “arma arrojadiza”. Con esta actitud, creamos en el que ha recibido el “impacto” una cierta aversión a la norma con la que acabamos de darle en la cabeza. Sobre todo si no es la primera vez que lo recibe. Además de esto, como en nuestro propio ejemplo no ve un acto de amor, tampoco se fía del contenido del mensaje con el que se ha sentido agredido más que amado.

San Francisco de Sales resume todo esto en una frase muy reveladora: “Se cazan más moscas con miel que con un barril de vinagre”.

Aterrizado a la vida matrimonial:

Maite: Paco ¿Para qué te has traído esa bandera blanca a la cama?
Paco: Vengo en son de paz. Llevamos tiempo echándonos en cara cada uno nuestras normas, y no creo que eso nos este ayudando a construir un matrimonio, por muy santas e importantes que sean esas normas. Propongo una tregua. ¿Qué te parece?
Maite: ¿Cuáles son tus condiciones?
Paco: Una palabra de tres sílabas: Ternura. Te propongo la revolución de la ternura entre nosotros. No es idea mía, es idea del Papa. Y es realmente una revolución, porque hoy en día no hay ternura en ninguna parte. ¿Qué te parece si iniciamos esa revolución en casa?
Maite: Bueno… suena bien.
Paco: Hoy, rezando el rosario, Ntra. Madre me ha transmitido Su ternura, y no sabes qué a gusto me he sentido junto a ella. Quiero que estés así de a gusto a mi lado. Fuera tensiones, fuera miedos, vamos a dejar de hacernos la vida imposible y vamos a disfrutar el uno del otro. Está en nuestras manos.
Maite: Vale, pues si me das un masaje en los pies, creo que es una buena manera de empezar tu campaña. Vengo rota…
Paco: ¡Hecho!

Madre,

Que seamos perseverantes en el amor, exigentes con nosotros mismos y misericordiosos con los demás. Madre. Ayúdanos a conseguirlo. Alabado sea Dios que nos muestra el camino del amor.