EVANGELIO
Curó a muchos enfermos de diversos males
Lectura del santo Evangelio según san Marcos 1, 29-39
En aquel tiempo, al salir Jesús de la sinagoga, fue con Santiago y Juan a casa de Simón y Andrés.
La suegra de Simón estaba en cama con fiebre, e inmediatamente le hablaron de ella. Él se acercó, la cogió de la mano y la levantó. Se le pasó la fiebre y se puso a servirles. Al anochecer, cuando se puso el sol, le llevaron todos los enfermos y endemoniados. La población entera se agolpaba a la puerta. Curó a muchos enfermos de diversos males y expulsó muchos demonios; y como los demonios lo conocían, no les permitía hablar.
Se levantó de madrugada, cuando todavía estaba muy oscuro, se marchó a un lugar solitario y allí se puso a orar. Simón y sus compañeros fueron en su busca y, al encontrarlo, le dijeron:
«Todo el mundo te busca».
Él les respondió:
«Vámonos a otra parte, a las aldeas cercanas, para predicar también allí; que para eso he salido».
Así recorrió toda Galilea, predicando en las sinagogas y expulsando los demonios.
Palabra del Señor.
Nota: Próximas misiones
- Anuncio en Pamplona: Domingo 11 de marzo a las 13h en la Parroquia de San Fermín.
- Retiro en Sevilla: 4 a 6 de mayo (No se ha abierto aún la convocatoria. Os mantendremos informados)
Ampliar el ancho de banda.
Evangelización, formación, sanación. Pero Cristo, que se despojó de su condición divina ¿de dónde saca las fuerzas? Aquel día se acostó muy tarde sanando enfermos, y se levantó “de madrugada”. ¿Qué le da más fuerza? ¿Descansar o rezar?. Todos los grandes seguidores de Dios que han dejado al oración han caído derrotados por su vanidad, porque tarde o temprano llegan a considerar la obra de Dios como propia. Qué peligroso es esto, tener el poder de Dios en nuestras manos. El Señor en cambio, huye de la aclamación popular, y se centra en la misión que el Padre le ha encomendado. Para el Señor sólo hay un espectador: El Padre.
Por eso es tan importante la oración diaria, porque tengo tendencia a apoderarme de la obra de Dios y pensar que soy yo quien lo hace. Por eso me gusta tanto el agradecimiento y la alabanza a Dios, porque me ayuda a tomar conciencia de a quién hay que dirigírselos.
Aterrizado a la vida matrimonial:
Juan: Oye, qué maravilla de retiro. Muchas gracias!!
Antonio: No, muchas gracias a Ntra. Madre, que es quien nos ha convocado aquí a todos. Y esto es una labor de todo este equipo maravilloso. Han trabajado muchísimo más que yo.
Juan: Pero gracias, porque vosotros sois los instrumentos…
(Unas horas después)
Antonio: (En la adoración al Santísimo) Señor, líbranos de caer jamás en la tentación de creernos autores de Tu obra. Gracias por las críticas que recibimos, gracias por los que nos ridiculizan… Gracias por la veces que en mi matrimonio dejas que vuelva a caer en algún pecado antiguo para que tome conciencia de que eres Tú quien me sostiene. Gracias Señor porque me has hecho entender que sin Ti, no soy nada. Señor, que yo mengüe para que Tú crezcas. Alabado seas por siempre.
Madre,
Qué maravilla el invento de la oración. Un canal abierto permanentemente para hablar con Dios y recibir sus Gracias. Y qué pena que no lo utilicemos más. A veces parece que me importa más los mensajes que recibo pro el whatsapp que los que tengo que recibir de Dios. Madre, he decidido ampliar el ancho de banda en mi línea con el Señor, porque quiero recibirlo todo de Él. Alabado sea el Señor.