Nadie puede decir que su matrimonio no tiene arreglo, o que su esposo no tiene arreglo, porque eso sería tanto como no confiar en el Espíritu Santo. Si lo rechazamos, ¿quién podrá salvarnos?
EVANGELIO
El Espíritu Santo os enseñará en aquel momento lo que tenéis que decir
Lectura del santo evangelio según san Lucas 12, 8-12
En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos:
«Todo aquel que se declare por mí ante los hombres, también el Hijo del hombre se declarará por él ante los ángeles de Dios, pero si uno me niega ante los hombres, será negado ante los ángeles de Dios.
Todo el que diga una palabra contra el Hijo del hombre podrá ser perdonado, pero al que blasfeme contra el Espíritu Santo no se le perdonará.
Cuando os conduzcan a la sinagoga, ante los magistrados y las autoridades, no os preocupéis de cómo o con qué razones os defenderéis o de lo que vais a decir, porque el Espíritu Santo os enseñará en aquel momento lo que tenéis que decir».
Palabra del Señor.
Notas: Próximas misiones.
- Anuncios en Sevilla:
- Sábado 20 de octubre 18:30 h. Parroquia Santiago el Mayor. Calle Ponce de León s/n. 41710 Utrera (Sevilla)
- Retiro en Barcelona: 26, 27 y 28 de octubre (Casa de Espiritualidad María Inmaculada. Tiana). Infórmate aquí: http://wp.me/p6AdRz-1mY
- Anuncios en Madrid noviembre:
- Viernes 16 a las 20h en San Jorge
- Fuenlabrada: Domingo 18 a las 18:30 en San Esteban Protomártir
- Martes 20 a las 20:30h en San Juan Crisóstomo
- Retiro en Valladolid: 23, 24 y 25 de noviembre (Casa de Espiritualidad Sagrado Corazón) Apertura de inscripciones jueves 18/10 a las 20h. Infórmate aquí: http://wp.me/p6AdRz-1px
- Retiro en Pamplona: 14, 15 y 16 de diciembre (Casa de Javier)
- Ver más en https://proyectoamorconyugal.es/misiones-y-noticias/
¿Matrimonio sin arreglo?
Nadie puede decir que es tan pecador, que no tiene arreglo. Nadie puede decir que su matrimonio no tiene arreglo, o que su esposo no tiene arreglo, porque eso sería tanto como no confiar en el Espíritu Santo. Si le rechazamos ¿quién podrá salvarnos?
María Magdalena la pecadora de la que Jesús echó 7 demonios, por sus pecados de la carne. En ella están simbolizadas todas las almas que Jesús libra de las garras del Maligno. María Magdalena, la despreciada como desecho por todos, se supo tan amada por Jesús que dejó su vida mundana por amor a Él. Al que mucho se le perdonó, mucho amó.
Aterrizado a la vida matrimonial:
Pedro: ¿Qué tal va lo tuyo con tu esposa?
Mario: Eso no tiene remedio. Hay una relación muy tensa, mucha separación, mucho desprecio acumulado. Mucho dolor. Ya ni hablamos.
Carlos: Tengo unos amigos que creo que te podrían ayudar.
Mario: Mira, creo que es absurdo. Hemos hablado ya con varios sacerdotes, y no ha habido ningún resultado. Yo creo que ni ella ni yo tenemos capacidad para solucionar esto.
Pedro: ¿piensas que has de ser especial, con especiales cualidades? ¿piensas que depende de la capacidad o las cualidades de ella? Habéis sido creados para esto. No te quepa la menor duda de que Dios no se equivoca. No podéis tirar la toalla. Lo único que quiere Jesús de nosotros es la fe y la confianza en que lo puede hacer y lo va a hacer, siempre y cuando, actuemos con Sus armas y no lo fastidiemos con las nuestras ¿confías en la promesas de Jesús?
Mario: Hombre, en eso sí.
Pedro: ¿Confías en las mediaciones que te envía Jesús? Pues yo soy. Yo te estoy hablando en Su nombre. Él no va a dejar que renunciéis a vuestra santidad. ¡Vamos hombre! No pierdas la Esperanza. El Señor no te abandona. Ya lo verás.
Madre,
Reconozco el poder de Dios en el Espíritu que actúa en las obras y en las enseñanzas de Jesús. Es el encuentro misericordioso y salvador del Padre. Reconozco el origen Divino y las obras del Espíritu Santo en la misión. Por todo ello, damos gracias al Espíritu Santo. Alabado sea.
Mario, mete en tu corazón las palabras de Pedro. Es el Espíritu Santo, del que habla Jesús en el evangelio de hoy, quien actúa por su boca. Él nunca nos va a dejar en la estancada si libremente seguimos confiando en Él. Nos dará, por boca y acciones de quien ponga en nuestra ruta, Su Espíritu para que podamos llevar a buen término la misión que nos pide con nuestro matrimonio… ¡Jamás desesperar!. Eso es desconfiar de Su Misericordia…
MADRE, en este día de sábado, en que la Iglesia te proclama, confiamos en Tu interseción.