La “garantía” de que mi matrimonio va a funcionar es la oración, que debe llevar el sello del Espíritu Santo para activarse. Sigue leyendo
No busques tu grandeza en tus iniciativas, busca tu grandeza en dejar que el Espíritu Santo actúe en ti y te haga experimentar que eres hijo de Dios, quien te ama infinitamente por ser tú. Sigue leyendo
De tanto mirar al lado y compararnos con nuestra/o esposa/o, dejamos de mirar hacia arriba y no seguimos a Jesús. Jesús me dice hoy: “A ti ¿qué? Tú sígueme». Sigue leyendo
Jesús eligió a mi esposa/o para mí y mi misión es amarla/o aunque me falle, como hizo Él con Pedro y conmigo. Sigue leyendo
La fórmula para hacernos uno entre nosotros es abandonar individualismos divergentes y «confluir» hacia la Verdad, que es Cristo, a través de la «Oración Conyugal «. Sigue leyendo