Archivo por días: 3 junio, 2015

La única manera. Comentario del Evangelio para Matrimonios: Marcos 12, 28b-34

EVANGELIO
El Señor, nuestro Dios, es el único Señor, y lo amarás

Lectura del santo evangelio según san Marcos 12, 28b-34
En aquel tiempo, un escriba se acercó a Jesús y le preguntó:
– «¿Qué mandamiento es el primero de todos?»
Respondió Jesús:
– «El primero es: «Escucha, Israel, el Señor, nuestro Dios, es el único Señor: amarás al Señor, tu Dios, con todo tu corazón, con toda tu alma, con toda tu mente, con todo tu ser.» El segundo es éste: «Amarás a tu prójimo como a ti mismo.» No hay mandamiento mayor que éstos.»
El escriba replicó:
– «Muy bien, Maestro, tienes razón cuando dices que el Señor es uno solo y no hay otro fuera de él; y que amarlo con todo el corazón, con todo el entendimiento y con todo el ser, y amar al prójimo como a uno mismo vale más que todos los holocaustos y sacrificios.»
Jesús, viendo que había respondido sensatamente, le dijo:
-«No estás lejos del reino de Dios.»
Y nadie se atrevió a hacerle más preguntas.

Palabra del Señor.

La única manera.
(Nota: Se hace uso genérico del masculino para designar la clase sin distinción de sexos.)

Todo se explica desde Dios: Quienes somos y cuáles son nuestros dinamismos. El amor entre los hombres, también se explica desde el amor a Dios o mejor dicho, el amor que Dios nos tiene. De hecho, es imposible amar a Dios y no amar al prójimo.

Esto lo entienden perfectamente Tobías y Sara cuando se unen en matrimonio. Lo vemos en la primera lectura, una de los más bellos pasajes del Evangelio para matrimonios. No os la perdáis. Para leerlo completo, son los capítulos del 6 al 8 del libro de Tobías. No tiene desperdicio y tiene una simbología preciosa

El Arcángel San Rafael, actúa como guía para Tobías y defensor de su matrimonio con Sara. Le indica a quién estaba llamado a elegir como esposa, y cómo debe salvarse de la muerte a la que esta unión le podía llevar. Como símbolo, Sara llevaba a sus espaldas 7 intentos de matrimonio y los 7 quedaros frustrados porque sus maridos morían cuando se intentaban acercar a ella en el lecho nupcial. La muerte les sobrevenía por causa de un demonio que los mataba.

Podíamos decir que se representa en esa escena las infinitas (el 7 en la Sagrada Escritura significa infinito) maneras que tenemos los esposos de acercarnos el uno al otro empujados por el demonio y que no nos ayudan a salvarnos sino que nos llevan a la muerte.

Pero la unión de Tobías y Sara es diferente, la única manera. Se postran y le ofrecen su unión a Dios. De Él reciben el don y a Él se lo ofrecen íntegramente. Copiamos aquí la oración de Tobías y Sara antes de su unión nupcial, y recomendamos a todos los esposos adaptarla y rezarla juntos también antes de su unión conyugal, para que Dios la bendiga y haga de ella un medio de salvación:

(Tobías 8, 4-ss) ‘-Tobías se levantó de la cama y dijo a Sara: Mujer, levántate, vamos a rezar, pidiendo a nuestro Señor que tenga misericordia de nosotros y nos proteja.-
Se levantó, y empezaron a rezar, pidiendo a Dios que los protegiera. Rezó así:
-Bendito eres, Dios de nuestros padres, y bendito tu nombre por los siglos de los siglos. Que te bendigan el cielo y todas tus criaturas por los siglos. Tú creaste a Adán, y como ayuda y apoyo creaste a su mujer, Eva; de los dos nació la raza humana. Tú dijiste: «No está bien que el hombre esté solo, voy a hacerle alguien como él, que lo ayude. » Si yo me caso con esta prima mía, no busco satisfacer mi pasión, sino que procedo lealmente. Dígnate apiadarte de ella y de mí, y haznos llegar juntos a la vejez.”-
Los dos dijeron: -Amén, amén.-’

Señor, que te amemos con todo nuestro corazón, con todo nuestro entendimiento y con todo nuestro ser, porque sólo en la medida en que nos llenemos de tu Amor nos amaremos el uno al otro como Tú amas, también en las dificultades.

Oramos por los frutos del sínodo de la familia:
https://proyectoamorconyugal.es/oracion-a-la-santa-familia/